Porque la mismísima Marilyn Monroe cayó rendida a las bondades de esta milenaria terapia oriental podría ser un argumento de peso para muchas. Para otros podría ser porque el conocidísimo boxeador Muhammad Alid no subía al ring sin recibir uno de estos masajes. Pero quizás lo mejor será comenzar por el principio. Procedente de “shi” (presión) y “atsu” (dedos) la palabra japonesa “shiatsu” no es más ni más que una antigua terapia oriental originaria de Japón y cultivada en China. Su principal objetivo es lograr como máximo beneficio la correcta canalización de la energía vital (Chi). Se trata de calmar y equilibrar cuerpo y mente con la presión de los dedos en ciertos puntos del cuerpo que luego son masajeados de manera sabia con la palma de los dedos.
El “shiatsu” en Japón ya es una terapia reconocida incluso por el propio Ministerio de Salud desde el año 1955. En Occidente no goza de tal consideración pero es innegable que se ha convertido en una de las terapias más solicitadas y demandadas por aquellos que acostumbran a cultivar el bienestar.
¿En qué consiste el “shiatsu”? Consiste esencialmente en la creencia de una energía vital que fluye por el cuerpo. Y según la fluidez de esa energía, así es la salud del organismo por el que fluye. Por tanto, es una terapia que básicamente trata de asegurar la buena circulación de esa energía vital. Y de esta forma se logra una perfecta armonía entre cuerpo, mente y espíritu.
Existen principalmente tres tipos de “shiatsu”.
- Shiatsu clásico (original). Se trata de presionar con los dedos una serie de puntos reflejos determinados por la fisiología del sistema nervioso.
- Shiatsu Zen. En este tipo de terapia se presionan los puntos meridianos con pulgares, rodillas y hasta codos. Es una terapia con la se trabaja todo el cuerpo.
- Tao Shiatsu. Es una fusión de las dos mencionadas anteriormente donde se combina la presión de puntos del sistema nervioso y también de los puntos meridianos.
Los beneficios del “shiatsu” son inmediatos dependiendo de la afección tratada y en otras ocasiones son a largo plazo. Esta terapia mejora el estado general del organismo y provoca una sensación de relajación gracias a la liberación de tensiones y grado de estrés.