¿Quién no desea perder de vista la temida piel de naranja? En Fariolen hemos encontrado una combinación de técnicas que permiten atenuarla de manera rápida y efectiva. Se trata además de técnicas mejoradas y perfeccionadas por nuestros terapeutas puesto que en caso contrario, una mala práctica podría generar graves consecuencias como el endurecimiento del tejido adiposo. Esto provocaría un empeoramiento de la movilización de las grasas y sería mucho más difícil luchar contra la celutitis. Por eso te recomendamos tener especial cuidado a la hora de elegir el centro y el tratamiento donde vas a combatir esta antiestética apariencia.
Un buen masaje es el primer paso y ataque para comenzar el ritual de batalla contra la piel de naranja. Debes saber que el masaje anticelulítico se acompaña normalmente de productos complementarios como geles reductores o cremas reafirmantes.
Los beneficios de un buen masaje anticelulítico son muchos y variados. En primer lugar favorece considerablemente el drenaje linfático. No menos importante es la reabsorción de los líquidos que se acumulan en el tejido adiposo. Con todo esto se logra favorecer la eliminación de las grasas que el organismo tiende a acumular.
Evidentemente un masaje aislado no es suficiente para combatir la celulitis. El tratamiento requiere un número de masajes continuados en el tiempo hasta observar la desaparición de la misma. La frecuencia de los masajes provoca la relajación del cuerpo y reduce el riesgo de padecer fibrosis.
Es muy recomendable tener en cuenta que una buena alimentación ayuda a reducir la celulitis. No se trata de llevar a cabo una dieta exhaustiva pero sí una ingesta de alimentos que favorezcan en la medida de lo posible la eliminación de toxinas y la disminución de peso. El ejercicio físico también suma puntos positivos en la batalla final contra la piel de naranja.