Estamos en uno de los meses más calurosos del año, unos de vuelta de sus vacaciones y otros las acaban de empezar. ¿El destino mayoritario? Las playas, por supuesto. Empezamos a tomar más el sol ya que pasamos largas horas en la playa, y es en esta época del año donde más tenemos que cuidar nuestra piel y evitar quemarnos por nuestra propia salud. Hoy, desde Fariolen os queremos hablar y aconsejar sobre las precauciones que debéis tomar a la hora de poneros al sol, pero también cómo un masaje puede aliviarte si ya te has quemado.
El sol nos proporciona muchas vitaminas, es fuente de vida y mejora nuestro estado de ánimo, ¡no lo vamos a negar el sol nos encanta! Pero hay que tener medida a la hora de ponerse bajo él, ya que tiene también efectos negativos como el envejecimiento prematuro de la piel, el riesgo de padecer cáncer de piel, etc. Aunque el efecto negativo más extendido son las quemaduras leves producidas en esos primeros días de baño o por falta de protección solar. Nuestra piel se enrojece y es más susceptible al roce, causando un leve daño en la epidermis.
Ante esta situación, lo lógico sería pensar que un masaje puede hacernos daño… Pero, ¡no es del todo cierto! Si la quemadura es leve, un masaje puede ayudar y aliviar ese dolor. Nuestros masajistas te harán un diagnóstico de esa quemadura y te ayudarán a que desaparezca con masajes en la zona afecta, hidratando la piel con productos naturales como el aloe vera y con técnicas milenarias basados en los conocimientos que tienen de la medicina ancestral oriental.
La importancia de la hidratación para nuestra piel
Independientemente del cuidado que nosotros demos a cada tipo de quemadura solar, tienes que saber que es muy importante hidratar y nutir bien tu piel todos los días y más en esta época del año.
Para la hidratación puedes usar aceites naturales, que respeten el PH neutro de la piel, o cremas hidratantes. Es imporatante que cuando hidrates tu piel, tanto con aceites como con cremas, lo hagas dando un pequeño masaje para llegar a todo el tejido y arrastar las células muertas. Para la hidratación de nuestra piel también es importante bebar agua, 1,5 litros diario como mínimo.
Para la nutrición de la piel, combatir su envejecimiento prematuro ¡lo mejor es un masaje terapéutico con chocolate!. Además de llevar una dieta sana y equilibrada, tomar mucha fruta y verdura, alimentos ricos en antioxidantes que ayudan a combatir los radicales libres.
Pero ante todo, lo mejor para combatir las quemaduras solares y mantener nuestra piel en perfecto estado es no olvidarse del protector solar nunca, para salir a la calle, para ir a la playa o a la piscina… El protector solar es lo mejor para evitar que el sol nos queme.